Lo siento por todos los que os perdisteis a The Cure el pasado jueves. Sinceramente, lo siento mucho. Era la tercera vez que les veía y las expectativas estaban bastante altas pero el concierto fue increible.
Lastima que la afluencia de publico fuera tan masiva que la única forma decente de ver el concierto fuera la grada (por no andarme pegando con góticos sudorosos y fans exhaltados). Pero por suerte estuve en muy buena compañía ahí arriba y a pesar de que el pobre Lucho y su chica tuvieron que aguantar mis aullidos y coros de friki incondicional de la banda creo que todos pudimos disfrutar de un concierto mágico.
Nadie puede decir que The Cure no están en forma. Cualquiera le dice a Robert Smith que está viejo y gordo mientras aguanta casi 3 horas encima de un escenario haciendo lo que mejor sabe hacer.
Hacía tiempo que no tenía escalofríos viendo un concierto... así que repito, pobres de vosotros todos los que os lo perdisteis.
Además he de decir que dieron un concierto bastante surtido de temas clásicos. Tan clásicos, tan clásicos como para repasar una parte importante del "Seventeen Seconds" en el primer bis (que me hizo muchisima ilusion) incluyendo M, Play For Today y A Forest. Tanta ilusión me hizo que estaba seguro que nada más llegar a casa postearía ese disco en el blog.
Pero me lo he pensado mejor. Os dejo Pornography. Probablemente su disco más gotico, oscuro, energético y a la vez redondo. Un disco que los fans ávidos de melodías juguetonas pueden descartar al momento.
Pornography gira en torno al bucle musical, al derrotismo emocional y a la opacidad típica de un quinceñero suicida (lo que hoy llamaríamos un EMO). Pero es probablemente el disco más potente y contundente que ha firmado la banda de Robert Smith en toda su carrera, y para mi gusto entra bastante fácil.
Como le dije a Lucho al final del concierto: ¡hay que ver lo que han mamao los Arcade Fire de toda esta mierda!
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1 comentario:
Esto ya era un golpe de efecto...
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