jueves, 25 de febrero de 2010

Nº 07 - Elvis Perkins In Dearland

Aquí en España la palabra "cantautor" es algo que da bastante repelús. Tiene un tufillo a pureta pseudo-concienciado políticamente que para colmo nos da lecciones sobre la vida mientras él se dedica a vivirla como un bohemio sin preocupaciones.


Sinceramente, los cantautores españoles (me da igual Ismael Serrano que Nacho Vegas) son un puro coñazo. Todos cortados por el mismo patrón, con ese aire que se dan...


Y sin embargo, no sé, me pega a mí mucho lo de llamar a Elvis Perkins "cantautor". Otros dirán que hace música folk, o pop o qué sé yo... pero hay algo en sus canciones tan sincero, puro y directo que se hace difícil distinguir entre el artista y la persona que hay detrás.


Esa honestidad es la que le ha traído hasta aquí con dos discos absolutamente imprescindibles y que de momento suena a que le tendremos alrededor durante unos cuantos años, lo cual sin duda es una gran noticia.

martes, 16 de febrero de 2010

Nº 08 - Sonic Youth - The Eternal


A Sonic Youth les recuerdo siempre con cariño porque me traen a la mente una historia de cuando era pequeño.


En aquella época tenía la impresión de que todo el mundo a mi alrededor hablaba de ellos y yo no me enteraba de nada. Estábamos en mitad de los 90, todavía no había cumplido 17 años.


Recuerdo el Washing Machines en la estantería de "prohibido tocar" de mi hermano y esas mismas camisetas de la portada las llevaban mis primos mellizos.


Llegó el verano y como tenía mucho tiempo libre y nada de dinero mi padre me ofreció mi primer trabajo. Quedamos en que durante un par de semanas le ayudaría en su tienda. Como era pequeño lo único que podía hacer era doblar camisas, camisetas y pantalones. No es que fuera muy duro, pero el tiempo pasaba exageradamente despacio.


Por fin llego el viernes esperado y me puse super nervioso. No recuerdo el dinero que me pagó, quizá unas 10.000 pesetas. Para mí era una fortuna! Y como era la primera vez que tenía tanto dinero junto me quemaban los bolsillos. Necesitaba gastarlo cuanto antes y pensé que lo mejor que podía hacer con él era comprarme unos CDs.


Entré en la tienda de música más cercana y me recorrí por orden alfabético todos los CDs cuidadosamente. Pensaba que ya que me había costado tanto trabajo ganar el dinero, tenia que comprar algo que mereciera la pena. Cuando llegué a la letra S de pronto encontré casi todos los discos de Sonic Youth rebajados. Entre 700 y 1500 pesetas cada uno (los discos de moda podían llegar a casi el doble).


Yo no les había escuchado nunca, pero sabía que aquello era bueno de verdad. En un ataque impulsivo total me compré : Goo, Dirty, Washing Machines, Screaming Fields of Sonic Love y el single Dirty Boots que contenía 5 canciones en directo.


A medio camino entre la emoción descontrolada y la sensación de culpa por haber gastado tanto dinero me marché a casa todo lo rápido que pude.


Entré en el salón, no había nadie en casa, puse el Washing Machines (era el único que me sonaba de algo) y subí el volumen a tope.


"Wish I could change the way that you feel...."


Aquello sonaba más extraño de lo que había imaginado. Tanto que no sabía si me gustaba o no. El sentimiento de culpa empezó a crecer.


"standing with him you feel more real...."


Mis primos me habían contado historias de que tocaban la guitarra con un taladro y cosas así, pero en aquel momento me pareció una genialidad y esto no sonaba para nada genial...


"looking so sweet with all your might..."


Escuche un par de canciones más y no mejoraba. Por un momento no me podía creer que hubiera gastado tanto dinero en algo que sonara tan mal y me enfadé conmigo mismo. No entendía por qué había hecho una estupidez tan grande.


Empecé a cambiar de CDs y todos me sonaban fatal.


De pronto di con uno de ellos que traía las letras de las canciones y como no tenia nada mejor que hacer (y quería amortizar aunque fuera mínimamente mi inversión) me senté con el libreto simplemente a escuchar. Me relajé. Me dejé llevar. Me concentré en la música y en las letras.


No puedo decir que en ese momento me empezaran a gustar, pero abrieron una puerta en mí. Durante unos cuantos meses lo único que escuché fue Sonic Youth, tenía 5 discos que repasar y me los ponía una y otra vez. Con el tiempo descubrí aquello de que la música que entra fácil se va fácil.


Sonic Youth me costó un esfuerzo doble (dos semanas de curro y unos cuantos meses de escuchas ininterrumpidas) pero hoy en día cuando me pongo The Eternal puedo decir que no existe ningún otro grupo (literalmente) que me haya acompañado durante tantos años y de una manera tan intensa.


Y lo mejor de todo es que si siguen funcionando como nos tienen acostumbrados, dentro de 10 años seguirán partiéndolo como ahora.


viernes, 12 de febrero de 2010

Nº 09 - Wilco - Wilco (The Album)

Como solía decir mi colega y ex-compi de piso Isma: "yo soy un hijo de mi tiempo". Si hago repaso de los discos que más me han gustado en mi vida, la mayoría se grabaron en los últimos 20 años.

Escuchar que ya no se hace música como la de antes, que los grupos de hoy no saben tocar o que en los 60 todo era mas auténtico me repatea.

Yo vivo enamorado del rock moderno (frase que tampoco es mía, sino de Steve Albini) y cualquiera que diga que hoy en día no se hace música auténtica y sincera, simplemente no tiene ojos en las orejas... bueno ya me entendéis.

Es verdad que hemos vivido una época en la que cientos de grupos se han visto obligados a funcionar según las necesidades del mercado y todas esas estupideces, pero gracias a Internet (factor clave en la supervivencia de la mayoría de las bandas que merecen la pena) y a la experiencia de 60 años de musica grabada, tenemos hoy entre manos joyas que no habrian sido posibles en ningun otro momento de la historia.

Algunos siguen pensando que los Beatles nunca serán superados, y yo a veces pienso que hasta Jeff Buckley ha sido superado ya (luego suelo pensármelo mejor).

El caso es que cuando escucho a Wilco lo que me viene a la cabeza (aparte de una sensación de placer sincero) es que con canciones como estas, con musicazos tan sobresalientes y carreras tan impecables, no tenemos nada que envidiarle a la música de la epoca de nuestros padres (y esa frase sí que es mía).

P.D: La portada lleva un link para escuchar el disco en Spotify. Si todavía no lo tenéis ¿a qué coño estáis esperando? Tengo algunas (pocas) invitaciones todavía para el que la necesite.

jueves, 11 de febrero de 2010

Futuro incierto...

Me entero a través de jenesaispop.com que blogger está empezando a cerrar blogs de un día para otro y sin previo aviso.

Algunos de los mejores ya han caído, de hecho es como si nunca hubieran existido. Avisados estáis por si vinieran los hombres de negro a deciros que SINBATERIA nunca existió.

lunes, 8 de febrero de 2010

Nº 10 - Eels - Hombre Lobo


Hace tan solo unos días que, por casualidad, cayó en mis manos la autobiografía escrita de Mark Oliver Everett, alias "E" de Eels (¡gracias Esdras!). Y por supuesto ahora mismo estoy sumergido profundamente en su historia.

Más allá de las cuatro o cinco pinceladas que todo fan conoce sobre la trágica vida de "E" el libro cuenta una historia que alterna lo increíble con lo común a un ritmo que a veces se antoja demasiado bueno para que lo haya escrito él mismo. Pero así es. "E" es uno de esos cabrones capaz de ponerse a rodar una película y dejarte con la boca abierta.

Y por supuesto, "Hombre Lobo" esta a la altura de todo lo que este hombre publica. Un álbum pseudo-conceptual, de una personalidad arrolladora y grabado en estricto directo con un regusto añejo ¿se puede pedir más?

Pues parace que al señor Everett siempre le puedes pedir más, porque lo cierto es que aunque aún es pronto para decirlo, es posible que el año que viene le tengamos otra vez en el top ten con su nuevo disco de corte diametralmente opuesto a este.

Por definición, un "grande artista". Incansable y siempre genial. Ya solo queda que se pase a vernos por Madrid algún día. ¡YA ESTA TARDANDO!

jueves, 4 de febrero de 2010

Nº 11 - Dinosaur Jr. - Farm

Tengo debilidad por las guitarras rugientes. No puedo evitarlo. Especialmente cuando se encuentran a las ordenes de una buena melodía. Y si detrás de ese muro sonoro se esconde una base rítmica contundente me estremezco con facilidad.

El grunge se edificó sobre esos principios y no puedo negar que fue una época musicalmente muy intensa para mí y que se me grabó a fuego.

Dinosaur Jr. no son grunge porque sencillamente son más antiguos que él.

J. Mascis inspiró a Sonic Youth (que a su vez inspiraron a Nirvana) y es una figura clave para entender gran parte de la música de los 90.

Él solito es capaz de hacer sonar el punk, el metal y el pop como si fueran uno solo y ahora nos trae este disco con la formación de dinosaurios original y con una producción capaz de hacer incondicional al menos pintado.

Por no hablar de una colección de canciones que poco tiene que envidiar discos como "You're living all over me" o "Bug".

Si estos son los dinosaurios que le toca vivir a mi generación los grupos de quinceañeros lo tienen difícil para luchar contra lo establecido.

lunes, 1 de febrero de 2010

Nº 12 - Iron And Wine - Norfolk


Quizá exista una regla no escrita que impide que los discos en directo aparezcan en las listas de fin de año (sí, esta es una lista de fin de año aunque estemos en febrero!).

Puede que fuera más inteligente haber hecho referencia a la jugosa recopilación de caras B que Iron & Wine ha publicado también este año con el nombre de Around The Well.

Es probable que las 18 canciones que contiene este álbum no pillen por sorpresa a ninguno de los que nos hemos acostumbrado a escuchar los tejemanejes de Samuel Beam.

Pero…

Con este disco me ha pasado algo curioso, y es que cuando acaba la última canción y me dispongo a decidir lo que voy a escuchar a continuación, todo me parece estúpido y ruidoso. Especialmente en un año lleno de propuestas tan estridentes como Fuck Buttons o Dan Deacon.

Y no es que me disguste la música ruidista pasada de vueltas, pero digamos que en una situación de vida o muerte le daría mi mano antes a un guitarrista que a ningún chalado con un ordenador portátil.

Llamadme carca, pero Norfolk respira más musicalidad (clásica, se entiende) por segundo de lo que nunca podrá inspirar ningún tren en llamas sampleado a 48.000 Hz.

Si no esta más arriba en la lista es porque a pesar de todo, sería dificil defenderlo como un gran disco dada su ausencia total de sorpresas y novedades, aunque escuchándolo bien, probablemente es mejor así.